Este día de los padres es una buena oportunidad para reconocer
todo lo que nosotros, los hombres, le ofrecemos a la sociedad. Tenemos una misión importante de ofrecer sustento, estabilidad y seguridad a los que la necesitan. A la misma vez, tenemos la sensibilidad de criar a nuestros hijos con amor. Somos parte indispensable de la polaridad que crea el balance en una pareja... de la unión entre lo masculino y lo femenino. Nuestra fuerza y nuestras buenas intenciones ayudan a crear un mundo más seguro en el cual puede florecer el amor.
Sin embargo, no es fácil ser hombre. Como seres humanos, no somos perfectos (y jamás lo seremos). Por generaciones hemos usado mal nuestras fuerzas y abusado de nuestro poder. Eso nos deja con un sentido de culpa que heredamos de nuestros antecesores masculinos. Esta culpa nos desconecta de lo que realmente somos...amor.
Por otro lado, se nos hace bien difícil encontrar modelos (‘role models’) que representen lo que es la masculinidad saludable y positiva. Muchos de los modelos que escogemos (cantantes, atletas, políticos, etc.) nos fallan, y terminan metidos en problemas de violencia y drogadicción.
Por supuesto, la prensa amarillista se enfoca más en cubrir los tropiezos de la gente famosa que en sus acciones humanas. Por lo tanto, nos sentimos perdidos cuando queremos hacer lo correcto. Hay que recordar que el modelo a seguir no es una persona en específico (nadie es perfecto) sino una actitud positiva que todos llevamos adentro.
En parte, la confusión se agrava al no estar claros de cuáles son las expectativas de nuestra contraparte, las mujeres. Por un lado, ellas esperan estar con una persona sensible que las mime, y por el otro lado, esperan una figura fuerte que las proteja y mantenga el orden en la casa. En esa búsqueda de cómo complacerlas es bien fácil separarnos de nuestra verdadera esencia. El modelo a seguir existe, lo que pasa es que no lo vemos.
Es bien interesante que la forma de cáncer más común entre los hombres es el cáncer de la próstata, que es un órgano que representa la masculinidad. El cáncer no es otra cosa que un grupo de células a quienes se les olvida que son parte de un todo y comienzan a actuar por su cuenta. ¿Acaso no es eso lo que hacemos a veces los hombres al tornarnos violentos? También podemos caer en el patrón de atacar a nuestra propia masculinidad... Por lo tanto, debemos estar siempre orgullosos de nuestra energía masculina y procurar utilizar nuestro poder para lograr el bien común. Recuerda que somos seres de luz.
Javier Ruiz esta convocando personas que esten interesadas en crear un "Men's Support Group" en Puerto Rico. Este concepto se practica en Europa y EU y le facilita a los hombres el modelo a seguir para vivir la masculinidad positiva. Puede contactarlo al (787)525-6905.