¿Por que no abren los comedores escolares?
El Departamento de Educación se resiste a abrir los comedores escolares para alimentar a las comunidades pobres que bordean ciertas escuelas. Muchos consideran que es su deber ministerial. Tienen la infraestructura, el personal (que ha estado cobrando durante la pandemia), la comida (pagada por con fondos federales), los mecanismos para hacérselo llegar a las personas necesitadas, etc.
Existe una orden judicial, que aparentemente el Departamento de Educación esta ignorando las ordenes judiciales. El juez Anthony Cuevas advirtió que “pudiera encontrar incurso en desacato a funcionarios de la agencia y ordenar arrestos”.
Mientras baja el riesgo del COVID, el gobierno ha ido permitiendo que regrese la actividad económica, ya están abriendo los salones de belleza, centros comerciales, actividades recreativas, pero no los comedores escolares. La Gobernadora hará su conferencia de prensa desde un cine (aparentemente van a abrir también los cines) pero no los comedores escolares.
¿Por qué?
El gobierno no abre los comedores para evitar contagio entre los empleados (al menos eso es lo que dicen). Aparentemente consideran que los comedores escolares no son parte de servicio esencial. Yo estoy en desacuerdo. No hay nada mas esencial que la comida. Con un numero mínimo de empleados se puede preparar la comida. Existen organizaciones publicas y privadas que pueden repartir la comida, así que los empleados no tienen que exponerse al publico. ¿Por qué hay tanta resistencia?
Razones sistémicas:
Detrás de este tipo de comportamiento, hay situaciones sistémicas. La energía transgeneracional (que pasa de generación en generación) altera el comportamiento de los que toman las decisiones. Por lo tanto, para entender el comportamiento de nuestros lideres actuales, necesitamos mirar la historia y el comportamiento de los lideres del pasado.
Me explico, el entorno donde crecemos afecta nuestra personalidad, y por consiguiente nuestro comportamiento. Si mis padres no se sentían seguros, se les va a hacer bien difícil hacerme sentir seguro. Yo voy a heredar muchos de los miedos, actitudes y comportamientos que ellos tienen. Lo mismo ocurrió con mis padres, abuelos, bisabuelos, etc. Lo mismo va a ocurrir con mis hijos, nietos, bisnietos, etc.
Puerto Rico sub-desarrollado:
Antes de los 1940s Puerto Rico no tenia la infraestructura que tiene hoy en día. Era bien difícil acceder a gran parte de las comunidades marginadas que vivían en la montana. Habían bien pocas carreteras y la mayoría de los caminos eran bien primitivos. Las condiciones de vida eran deplorables. Habían enfermedades, como la malaria, que no se sabían como manejarlas. Habían conflictos obrero-patronales, lo que creaba un miedo adicional para las autoridades, ya que podrían haber insurgentes en las zonas remotas.
Hace 100 años había un riesgo legitimo cuando las autoridades trataban de acceder a las comunidades marginadas. Ese miedo ya no aplica, pero el miedo sigue ahí.
Para los gobiernos de turno, siempre ha sido un reto atender las necesidades de los ciudadanos luego de los desastres naturales. En el 1899, un año después de la invasión norteamericana enfrentamos el Huracán San Ciriaco. El mismo fue categoría 4, y dejo 3,369 muertos registrados (y muchos mas sin registrar). Puerto Rico era dirigido por un gobierno militar que todavía no estaba bien establecido. No tenían acceso a las comunidades mas necesitadas. No conocían el idioma. No tenían acceso a las provisiones que necesitaban para servirle a la gente. Le tenían miedo a los insurgentes, y a la desesperación de la gente. Mucha gente necesitaba ser alimentada, pero el alimento nunca llego.
Situaciones similares ocurrieron luego de los huracanes San Narciso (1867), San Felipe I (1876), San Roque (1893), San Felipe II (1928), San Ciprian (1932), y el terremoto del 1918.
Fuego del Polvorín, Ponce:
Luego de la invasión, el ejercito norteamericano estableció un almacén de pólvora en el casco urbano de Ponce. Esto fue controversial, ya que creaba un riesgo para el pueblo en caso de fuego. El 25 de enero de 1899 hubo un fuego en un almacén de heno que colindaba con el polvorín. El gobierno mando a desalojar y dio ordenes de que no se extinguiera el fuego. Un grupo de bomberos voluntarios apagaron el fuego, por lo que fueron arrestados por insubordinación, pero luego fueron recompensados por su valentía.
Nuestra historia controla nuestro subconsciente. Sin darnos cuenta, estamos actuando desde los miedos de nuestros antepasados. Por eso actuamos irracionalmente. A la medida que vayamos conociendo la historia, podremos superar esas decisiones irracionales y nos fortaleceremos (en vez de debilitarnos) con todo lo que ha pasado.
A nivel personal hacemos lo mismo. Tomamos decisiones basadas en los miedos y preocupaciones de nuestros antecesores. Las Constelaciones Familiares nos ayudan a liberarnos de todas esas energías, para que podamos vivir mas coherentemente.