Mi intención para el nuevo año es seguir conectando profunda y genuinamente con mis seres queridos. Seguir profundizando la conexión. Recibirlos desde el corazón, sin ningún miedo ni expectativa.
Mi intención es aceptar a cada uno tal y como es… sin esperar nada de nadie. Solamente recibir lo que ellos tengan que aportar.
A veces esto incluye la necesidad de establecer y mantener limites saludables. Esto no significa que vayamos a rechazar ni a juzgar a nadie. Solo significa que tengo la suficiente madurez para establecer las condiciones necesaria para lograr que la relación sea beneficiosa para ambos.
También intenciono mejorar mi relación con mis enemigos. Estos son nuestros maestros. Ellos nos enseñan cuáles son los prejuicios e inseguridades que no hemos superado. Nos dan la oportunidad de crecer y convertirnos en adultos. Además, tenemos algo en común. Yo también le sirvo de espejo a ellos (también les señalo sus prejuicios e inseguridades).
Una de las relaciones más importantes es conmigo mismo. Intenciono seguir aprendiendo a amarme incondicionalmente, y estar en paz con quien soy. Descubrir que no tengo que hacer nada para ganarme el amor de nadie.
Otra relación importante para profundizar es con Dios. Seguir aprendiendo que él me ama incondicionalmente y no espera nada de mí. Todo lo que tengo que hacer es ser yo. Esta bien tener miedos e imperfecciones. Por lo tanto, todo lo que necesito es darme permiso a recibir el amor De Dios. Dejar atrás los prejuicios, dramas y expectativas. Mis miedos, culpas e inseguridades son las que me separan del amor de Dios (que siempre está ahi).
Mientras voy aprendiendo a estar cómodo conmigo mismo (y con todo lo que me rodea) tengo todo lo que necesito. No hace falta más nada.
Feliz 2021
Javier Ruiz
SanacionPR.com