La Importancia del Agradecimiento
Día de Acción de Gracias (Thanksgiving):
Hoy celebramos el día de Acción de Gracias en Puerto Rico y los Estados Unidos. El año pasado estuvimos limitados por la pandemia, pero ya estamos mucho mas cómodos dándole ese gran abrazo a nuestros seres queridos.
Muchos lo usamos como una oportunidad para reunirnos con la familia, y agradecer las bendiciones que hemos recibido durante todo el año. Es un ritual que aunque parezca sencillo puede ser bien poderoso.
El agradecimiento, al igual que el amor, es uno de los sentimientos que mas nos ayuda a aumentar la frecuencia de nuestra energía. Por lo tanto, nos fortalece. Es una de las acciones más importantes que tenemos que practicar, si queremos ser felices.
Ser agradecido en todo momento es mas difícil de lo que parece (voy a hablar mas de esto) pero nos va a llevar a vivir mejor. Tenemos que aceptar y agradecer nuestra historia (con todo lo que ocurrió, “bueno y malo”) para poder estar en paz con el presente, y poder agradecerlo.
Historia del Día de Acción de Gracias:
El inicio de la celebración (Thanksgiving) se remonta al 1621, cuando un grupo de colonizadores hicieron una festividad de otoño que duró 3 días. Estaban celebrando que habían tenido éxito en lograr la cosecha del maíz, luego de haber pasado un invierno brutal, que pensaron que no iban a sobrevivir.
Después de 66 días de viaje en barco (Mayflower) desde Inglaterra, pasaron más de un mes anclados dentro del barco, sin poder bajarse porque el clima no se los permitía. Casi la mitad de la tripulación (102) murió por problemas de salubridad. En marzo, finalmente pudieron salir y fueron recibidos por varios indígenas que les enseñaron técnicas de supervivencia, sustentabilidad y agricultura local.
Fíjate como ellos, a pesar de estar viviendo en unas condiciones tan difíciles, y de haber tenido tantas dificultades, se están enfocando en el éxito y en los eventos positivos. Ellos celebraron su éxito. Esa fue la base de la creación de los Estados Unidos.
En los 1800s, la escritora Sarah Hale (la Oprah Winfrey de aquellos tiempos) comenzó a cabildear para que se celebre un día nacional de acción de gracias. Desde el 1851, tenemos artículos en los periódicos en los que se le agradece a los agricultores por el servicio que nos dan. También le agradecen a las familias de los agricultores por la paciencia (ya que el padre de la familia tiene que pasar la temporada de cosecha alejado de su familia). Varios estados se unieron a la celebración.
En 1863, el Presidente Abraham Lincoln hizo una proclama para que el último jueves del mes de noviembre, la nación se una para dar gracias. Ese primer año, se paralizo (temporeramente) la Guerra Civil, y ambos bandos se dedicaron a agradecer.
Hoy en día, aunque se ha comercializado mucho la celebración del día de acción de gracias, las familias aprovechan la oportunidad para unirse. Me gustaría que la parte del agradecimiento se torne más profundo y genuino.
La importancia del agradecimiento:
Si agradecemos todo lo que tenemos (independientemente de si tenemos “mucho o poco”), vamos a ser mucho más felices.
Nuestro primer agradecimiento debe estar dirigido a nuestros padres, que nos han dado la vida, al igual que todas las experiencias de la niñez. Ellos influenciaron mucho en nuestros valores, nuestra personalidad, nuestro estilo de vida, etc. Las costumbres y gran parte de nuestro conocimiento lo aprendimos a través de ellos. Todo lo que tenemos se lo debemos a ellos. Tenemos que agradecer todo tal y como fue (a pesar de que hayamos tenido heridas y carencias). Si no le podemos agradecer a los padres, se nos hará difícil valorar y agradecer otras cosas en la vida.
También hay que agradecerle a todos nuestros ancestros (familiares) que crearon el espacio para que nuestros padres tuvieran lo que tienen y que nosotros pudiéramos llegar a la vida y ser quienes somos. Esto incluye también a nuestros antepasados, al país donde vivimos, a nuestra historia (la historia de nuestra familia, de nuestro país, historia del mundo), etc. Verdaderamente hemos recibido mucho y no siempre lo vemos.
Hoy celebramos el día de Acción de Gracias en Puerto Rico y los Estados Unidos. El año pasado estuvimos limitados por la pandemia, pero ya estamos mucho mas cómodos dándole ese gran abrazo a nuestros seres queridos.
Muchos lo usamos como una oportunidad para reunirnos con la familia, y agradecer las bendiciones que hemos recibido durante todo el año. Es un ritual que aunque parezca sencillo puede ser bien poderoso.
El agradecimiento, al igual que el amor, es uno de los sentimientos que mas nos ayuda a aumentar la frecuencia de nuestra energía. Por lo tanto, nos fortalece. Es una de las acciones más importantes que tenemos que practicar, si queremos ser felices.
Ser agradecido en todo momento es mas difícil de lo que parece (voy a hablar mas de esto) pero nos va a llevar a vivir mejor. Tenemos que aceptar y agradecer nuestra historia (con todo lo que ocurrió, “bueno y malo”) para poder estar en paz con el presente, y poder agradecerlo.
Historia del Día de Acción de Gracias:
El inicio de la celebración (Thanksgiving) se remonta al 1621, cuando un grupo de colonizadores hicieron una festividad de otoño que duró 3 días. Estaban celebrando que habían tenido éxito en lograr la cosecha del maíz, luego de haber pasado un invierno brutal, que pensaron que no iban a sobrevivir.
Después de 66 días de viaje en barco (Mayflower) desde Inglaterra, pasaron más de un mes anclados dentro del barco, sin poder bajarse porque el clima no se los permitía. Casi la mitad de la tripulación (102) murió por problemas de salubridad. En marzo, finalmente pudieron salir y fueron recibidos por varios indígenas que les enseñaron técnicas de supervivencia, sustentabilidad y agricultura local.
Fíjate como ellos, a pesar de estar viviendo en unas condiciones tan difíciles, y de haber tenido tantas dificultades, se están enfocando en el éxito y en los eventos positivos. Ellos celebraron su éxito. Esa fue la base de la creación de los Estados Unidos.
En los 1800s, la escritora Sarah Hale (la Oprah Winfrey de aquellos tiempos) comenzó a cabildear para que se celebre un día nacional de acción de gracias. Desde el 1851, tenemos artículos en los periódicos en los que se le agradece a los agricultores por el servicio que nos dan. También le agradecen a las familias de los agricultores por la paciencia (ya que el padre de la familia tiene que pasar la temporada de cosecha alejado de su familia). Varios estados se unieron a la celebración.
En 1863, el Presidente Abraham Lincoln hizo una proclama para que el último jueves del mes de noviembre, la nación se una para dar gracias. Ese primer año, se paralizo (temporeramente) la Guerra Civil, y ambos bandos se dedicaron a agradecer.
Hoy en día, aunque se ha comercializado mucho la celebración del día de acción de gracias, las familias aprovechan la oportunidad para unirse. Me gustaría que la parte del agradecimiento se torne más profundo y genuino.
La importancia del agradecimiento:
Si agradecemos todo lo que tenemos (independientemente de si tenemos “mucho o poco”), vamos a ser mucho más felices.
Nuestro primer agradecimiento debe estar dirigido a nuestros padres, que nos han dado la vida, al igual que todas las experiencias de la niñez. Ellos influenciaron mucho en nuestros valores, nuestra personalidad, nuestro estilo de vida, etc. Las costumbres y gran parte de nuestro conocimiento lo aprendimos a través de ellos. Todo lo que tenemos se lo debemos a ellos. Tenemos que agradecer todo tal y como fue (a pesar de que hayamos tenido heridas y carencias). Si no le podemos agradecer a los padres, se nos hará difícil valorar y agradecer otras cosas en la vida.
También hay que agradecerle a todos nuestros ancestros (familiares) que crearon el espacio para que nuestros padres tuvieran lo que tienen y que nosotros pudiéramos llegar a la vida y ser quienes somos. Esto incluye también a nuestros antepasados, al país donde vivimos, a nuestra historia (la historia de nuestra familia, de nuestro país, historia del mundo), etc. Verdaderamente hemos recibido mucho y no siempre lo vemos.
Somos abundantes:
Debemos recordar que lo tenemos todo: comida, agua potable, albergue, ropa y salud perfecta (si no, no estuviéramos vivos), entre muchas otras cosas.
Nuestra tendencia es enfocarnos en que queremos tener más y perdemos la noción de lo que ya tenemos. En cierta forma somos millonarios y no nos damos cuenta. Tenemos la suerte de vivir en el siglo 21, y en un buen lugar en el mundo.
¿Cómo compara mi riqueza con el resto del mundo?
De acuerdo a la pagina:
https://wid.world/simulator/
Si ganas $24,000 al año ($2,000/mes):
- Eres de los 14% más ricos del mundo
(eso significa que el 86% de la población mundial es más pobre que tú)
- A un trabajador promedio en Ghana le tomaría 154 años ganarse lo que tu te ganas en un año.
- Con lo que tu ganas cada mes, puedes pagarle el salario mensual a 110 médicos en Pakistán.
- Existen 1.2 billones de personas en el mundo que tratan de sobrevivir con menos de $1 por día.
Vivimos en el mejor de los tiempos (y lugar):
Muchas veces nos quejamos de los tiempos que vivimos. Sin embargo no nos damos cuenta de que nuestros antepasados nos han dejado muchas comodidades que hoy en día disfrutamos sin darnos cuenta. Debemos tener en cuenta que hace par de siglos no existían los inodoros, ni las duchas, el recogido de basura, iluminación, aire acondicionado (ni calefacción), teléfonos, jabón, comida, casas a prueba de tormentas, medicinas (la gente se moría de cualquier catarro o infección), entre muchas otras cosas.
Tampoco teníamos los permisos y las libertades con las que contamos hoy en día. En el feudalismo todo era propiedad del rey. Tu trabajabas a tiempo completo para ganar apenas suficiente comida para sobrevivir (y aun así, mucha gente moría de hambre). Cualquier plaga o desastre natural podía causar que se pierda la cosecha y que murieran de hambre cientos de personas. Nadie podía criticar a los reyes. Los reyes y sus representantes podían bajar cuando quisieran y saquear tu casa, o hostigar a las mujeres de la familia, y no había nada que nadie pudiera hacer al respecto. En cualquier momento se podían recibir invasiones de los otros reinados, y quemaban los pueblos, mataban a la gente, dañaban las cosechas, etc.
En los tiempos de guerra la gente vive dentro de un miedo continuo, ya que en cualquier momento te pueden matar o matar a tus seres queridos. Los invasores lo primero que hacen es destruir la infraestructura y las vías de comunicación. No hay comida, ya que se bloquea el acceso a la misma. No se puede cosechar nada. Tampoco tienes comunicación para saber si tus seres queridos están vivos o muertos (recuerdos del Huracán María). Muchas personas deciden escapar y convertirse en refugiados o inmigrantes en países que no los quieren (y que se les hace difícil adaptarse ya que no conocen el idioma, no tienen trabajo, dinero, comida, etc).
Tenemos que agradecer enormemente que vivimos en tiempos de paz y en un lugar que no ve guerras desde hace muchos años.
Hay que agradecerle a las miles de personas que dieron sus vidas por garantizar las libertades que disfrutamos hoy en día en el que casi todo el mundo tiene derecho a la educación, las mujeres pueden votar, se respetan las minorías, los homosexuales, se mira con compasión a las personas discapacitadas, etc.
También hay que agradecerle a las personas que dan su vida por suplirnos los productos que utilizamos diariamente como la comida, la ropa, combustible, celulares, etc. Mucha gente vive miserablemente para que podamos tener ciertas comodidades.
A través de los siglos, millones de personas (esclavos, obreros, peones, tainos, etc.) construyeron la infraestructura que hoy disfrutamos (por ejemplo, carreteras). Hoy en día nos beneficiamos del sacrificio de otras personas. Eso hay que agradecerlo.
También tenemos que agradecer que vivimos en una de las islas mas bonitas del mundo. Tenemos recursos naturales, un clima agradable y gente maravillosa que se apoya mutuamente durante los momentos difíciles.
¿Por que no nos sentimos tan abundantes?
Existen varias razones:
1) El cerebro humano esta diseñado para resolver problemas. Siempre esta buscando problemas que resolver. Por lo tanto, se nos hace difícil ver (y agradecer) lo que tenemos.
2) El dolor de nuestros antepasados esta en nuestra memoria celular. Sin darnos cuenta, lo hacemos nuestro. Es necesario liberarnos de el.
3) Cuando somos niños, sufrimos heridas y decepciones que aun sentimos consciente o inconscientemente. Al trabajar con nuestro niño interior, nos podemos ir liberando de esas heridas, y pasar a vivir desde el adulto consciente y agradecido.
4) La maquinaria capitalista nos hace creer que necesitamos adquirir mas bienes materiales (carros caros, atuendos, ropa de moda, smartphones, prendas, vanidades, regalos para toda la familia, etc) para que estemos completos. Nos toca a nosotros reconocer lo que tenemos y sentirnos llenos para no caer en la trampa. Si fuera por ellos, nunca vamos a ser felices.
La buena noticia es que somos seres pensantes y podemos tomar decisiones diferentes. Cuando empecemos a agradecer las millones de cosas que tenemos vamos a ser mucho mas felices.
El capitalismo nos ha dado mucho. Hay que agradecerle, pero tenemos que tener en cuenta que somos mucho mas que un potencial mercado de consumo. Somos seres maravillosos que estamos viviendo una vida excelente, llena de abundancia.
Ley de Atracción:
Mucha gente habla sobre la Ley de Atracción, pero piensan que se trata de enfocarse en lo que nos falta. De esa manera manifiestan escasez (o el sentimiento de escasez).
Cada vez que agradeces, estas programando a tu cuerpo, a tu mente, a tus compañeros de trabajo, a tu familia, al Universo, etc. Y vas a manifestar abundancia. La imagen mental que estas desarrollando en tu cabeza es de éxito, y por lo tanto vas a estar programando a tu mente inconsciente a obtener este éxito.
Para tus aliados, es mucho más llevadero trabajar con alguien positivo que les está agradeciendo genuinamente, y por lo tanto te van a ayudar más.
Tu seres queridos:
El mejor regalo que le podemos dar a nuestros seres queridos (hijos, padres, hermanos, amigos, etc.) no son regalos caros, sino el agradecimiento (genuino) por todo lo que ellos han aportado a nuestras vidas. Podemos reconocer todo lo que hemos aprendido con las conversaciones que hemos tenido con ellos, lo que hemos disfrutado en los momentos maravillosos en cada etapa de la relación. Podemos reconocer y agradecer la presencia de ellos en nuestras vidas, y como mi vida no sería lo mismo si esta persona no existiera.
Fíjate que al agradecer la presencia de esta persona, lo estas reconociendo y aceptando tal y como es, y por lo tanto lo estas validando genuinamente (que es el mejor regalo que le podemos dar). Una de las principales necesidades del ser humano es sentirse aceptado.
No tienes que mentir ni pretender nada… reconocer y agradecer su presencia en tu vida.
Desapego:
Las enseñanzas del budismo hablan de tomar y agradecer todo lo que tenemos, pero no estar apegados a las posesiones. Mientras tengo abundancia, lo debo disfrutar. Pero si pierdo lo que tengo (de la manera que sea) me toca adaptarme a la nueva realidad. Ser feliz independientemente de lo que tengo o no tengo.
Debemos dejar de enfocarnos en lo que no tenemos, y agradecer todo lo que tenemos (que es mucho). Si no vas a agradecer lo que tienes, ¿de que te sirve tenerlo?
Conclusión:
El agradecimiento es una de las acciones más importante que tenemos que hacer diariamente.
Al levantarnos, lo primero que debemos hacer es agradecer que tengamos un día más de vida. Mientras hacemos labores rutinarias (en el tapón) podemos aprovechar la oportunidad para pensar en situaciones adicionales por las que debemos estar agradecidos. Cada vez que estemos pasando una situación difícil, debemos agradecer que tengamos la conciencia para superar cualquier situación de aprendizaje y que vayamos a salir bien de todo.
Cada vez que la vida nos regale un paisaje bonito debemos agradecer. Cada vez que ocurra una situación bonita (la sonrisa de un niño, el encontrarme con un amigo, el recibir llamadas de familiares, etc.), debemos agradecer. Cada vez que nos acordemos de las millones de casualidades que tuvieron que ocurrir para que tu organismo pueda mantener la vida, debemos agradecer. En verdad no debemos necesitar ninguna excusa… debemos siempre agradecer.
Antes de acostarnos debemos agradecer todo lo que logramos o aprendimos durante el día.
Vamos a agradecer ahora que estemos escuchando un mensaje bonito, y que estemos vivos (y saludables).
Mientras más agradezcas, más bonita se pondrá la vida.
Yo agradezco tu atención, y agradezco que compartas este mensaje, para ayudar a hacer un mundo mejor.
Soy Javier Ruiz, el facilitador del podcast, Superación en Tiempos de Pandemia. Me puedes seguir en la pagina: SuperacionPandemia.com
Feliz Día de Acción de Gracias.
Debemos recordar que lo tenemos todo: comida, agua potable, albergue, ropa y salud perfecta (si no, no estuviéramos vivos), entre muchas otras cosas.
Nuestra tendencia es enfocarnos en que queremos tener más y perdemos la noción de lo que ya tenemos. En cierta forma somos millonarios y no nos damos cuenta. Tenemos la suerte de vivir en el siglo 21, y en un buen lugar en el mundo.
¿Cómo compara mi riqueza con el resto del mundo?
De acuerdo a la pagina:
https://wid.world/simulator/
Si ganas $24,000 al año ($2,000/mes):
- Eres de los 14% más ricos del mundo
(eso significa que el 86% de la población mundial es más pobre que tú)
- A un trabajador promedio en Ghana le tomaría 154 años ganarse lo que tu te ganas en un año.
- Con lo que tu ganas cada mes, puedes pagarle el salario mensual a 110 médicos en Pakistán.
- Existen 1.2 billones de personas en el mundo que tratan de sobrevivir con menos de $1 por día.
Vivimos en el mejor de los tiempos (y lugar):
Muchas veces nos quejamos de los tiempos que vivimos. Sin embargo no nos damos cuenta de que nuestros antepasados nos han dejado muchas comodidades que hoy en día disfrutamos sin darnos cuenta. Debemos tener en cuenta que hace par de siglos no existían los inodoros, ni las duchas, el recogido de basura, iluminación, aire acondicionado (ni calefacción), teléfonos, jabón, comida, casas a prueba de tormentas, medicinas (la gente se moría de cualquier catarro o infección), entre muchas otras cosas.
Tampoco teníamos los permisos y las libertades con las que contamos hoy en día. En el feudalismo todo era propiedad del rey. Tu trabajabas a tiempo completo para ganar apenas suficiente comida para sobrevivir (y aun así, mucha gente moría de hambre). Cualquier plaga o desastre natural podía causar que se pierda la cosecha y que murieran de hambre cientos de personas. Nadie podía criticar a los reyes. Los reyes y sus representantes podían bajar cuando quisieran y saquear tu casa, o hostigar a las mujeres de la familia, y no había nada que nadie pudiera hacer al respecto. En cualquier momento se podían recibir invasiones de los otros reinados, y quemaban los pueblos, mataban a la gente, dañaban las cosechas, etc.
En los tiempos de guerra la gente vive dentro de un miedo continuo, ya que en cualquier momento te pueden matar o matar a tus seres queridos. Los invasores lo primero que hacen es destruir la infraestructura y las vías de comunicación. No hay comida, ya que se bloquea el acceso a la misma. No se puede cosechar nada. Tampoco tienes comunicación para saber si tus seres queridos están vivos o muertos (recuerdos del Huracán María). Muchas personas deciden escapar y convertirse en refugiados o inmigrantes en países que no los quieren (y que se les hace difícil adaptarse ya que no conocen el idioma, no tienen trabajo, dinero, comida, etc).
Tenemos que agradecer enormemente que vivimos en tiempos de paz y en un lugar que no ve guerras desde hace muchos años.
Hay que agradecerle a las miles de personas que dieron sus vidas por garantizar las libertades que disfrutamos hoy en día en el que casi todo el mundo tiene derecho a la educación, las mujeres pueden votar, se respetan las minorías, los homosexuales, se mira con compasión a las personas discapacitadas, etc.
También hay que agradecerle a las personas que dan su vida por suplirnos los productos que utilizamos diariamente como la comida, la ropa, combustible, celulares, etc. Mucha gente vive miserablemente para que podamos tener ciertas comodidades.
A través de los siglos, millones de personas (esclavos, obreros, peones, tainos, etc.) construyeron la infraestructura que hoy disfrutamos (por ejemplo, carreteras). Hoy en día nos beneficiamos del sacrificio de otras personas. Eso hay que agradecerlo.
También tenemos que agradecer que vivimos en una de las islas mas bonitas del mundo. Tenemos recursos naturales, un clima agradable y gente maravillosa que se apoya mutuamente durante los momentos difíciles.
¿Por que no nos sentimos tan abundantes?
Existen varias razones:
1) El cerebro humano esta diseñado para resolver problemas. Siempre esta buscando problemas que resolver. Por lo tanto, se nos hace difícil ver (y agradecer) lo que tenemos.
2) El dolor de nuestros antepasados esta en nuestra memoria celular. Sin darnos cuenta, lo hacemos nuestro. Es necesario liberarnos de el.
3) Cuando somos niños, sufrimos heridas y decepciones que aun sentimos consciente o inconscientemente. Al trabajar con nuestro niño interior, nos podemos ir liberando de esas heridas, y pasar a vivir desde el adulto consciente y agradecido.
4) La maquinaria capitalista nos hace creer que necesitamos adquirir mas bienes materiales (carros caros, atuendos, ropa de moda, smartphones, prendas, vanidades, regalos para toda la familia, etc) para que estemos completos. Nos toca a nosotros reconocer lo que tenemos y sentirnos llenos para no caer en la trampa. Si fuera por ellos, nunca vamos a ser felices.
La buena noticia es que somos seres pensantes y podemos tomar decisiones diferentes. Cuando empecemos a agradecer las millones de cosas que tenemos vamos a ser mucho mas felices.
El capitalismo nos ha dado mucho. Hay que agradecerle, pero tenemos que tener en cuenta que somos mucho mas que un potencial mercado de consumo. Somos seres maravillosos que estamos viviendo una vida excelente, llena de abundancia.
Ley de Atracción:
Mucha gente habla sobre la Ley de Atracción, pero piensan que se trata de enfocarse en lo que nos falta. De esa manera manifiestan escasez (o el sentimiento de escasez).
Cada vez que agradeces, estas programando a tu cuerpo, a tu mente, a tus compañeros de trabajo, a tu familia, al Universo, etc. Y vas a manifestar abundancia. La imagen mental que estas desarrollando en tu cabeza es de éxito, y por lo tanto vas a estar programando a tu mente inconsciente a obtener este éxito.
Para tus aliados, es mucho más llevadero trabajar con alguien positivo que les está agradeciendo genuinamente, y por lo tanto te van a ayudar más.
Tu seres queridos:
El mejor regalo que le podemos dar a nuestros seres queridos (hijos, padres, hermanos, amigos, etc.) no son regalos caros, sino el agradecimiento (genuino) por todo lo que ellos han aportado a nuestras vidas. Podemos reconocer todo lo que hemos aprendido con las conversaciones que hemos tenido con ellos, lo que hemos disfrutado en los momentos maravillosos en cada etapa de la relación. Podemos reconocer y agradecer la presencia de ellos en nuestras vidas, y como mi vida no sería lo mismo si esta persona no existiera.
Fíjate que al agradecer la presencia de esta persona, lo estas reconociendo y aceptando tal y como es, y por lo tanto lo estas validando genuinamente (que es el mejor regalo que le podemos dar). Una de las principales necesidades del ser humano es sentirse aceptado.
No tienes que mentir ni pretender nada… reconocer y agradecer su presencia en tu vida.
Desapego:
Las enseñanzas del budismo hablan de tomar y agradecer todo lo que tenemos, pero no estar apegados a las posesiones. Mientras tengo abundancia, lo debo disfrutar. Pero si pierdo lo que tengo (de la manera que sea) me toca adaptarme a la nueva realidad. Ser feliz independientemente de lo que tengo o no tengo.
Debemos dejar de enfocarnos en lo que no tenemos, y agradecer todo lo que tenemos (que es mucho). Si no vas a agradecer lo que tienes, ¿de que te sirve tenerlo?
Conclusión:
El agradecimiento es una de las acciones más importante que tenemos que hacer diariamente.
Al levantarnos, lo primero que debemos hacer es agradecer que tengamos un día más de vida. Mientras hacemos labores rutinarias (en el tapón) podemos aprovechar la oportunidad para pensar en situaciones adicionales por las que debemos estar agradecidos. Cada vez que estemos pasando una situación difícil, debemos agradecer que tengamos la conciencia para superar cualquier situación de aprendizaje y que vayamos a salir bien de todo.
Cada vez que la vida nos regale un paisaje bonito debemos agradecer. Cada vez que ocurra una situación bonita (la sonrisa de un niño, el encontrarme con un amigo, el recibir llamadas de familiares, etc.), debemos agradecer. Cada vez que nos acordemos de las millones de casualidades que tuvieron que ocurrir para que tu organismo pueda mantener la vida, debemos agradecer. En verdad no debemos necesitar ninguna excusa… debemos siempre agradecer.
Antes de acostarnos debemos agradecer todo lo que logramos o aprendimos durante el día.
Vamos a agradecer ahora que estemos escuchando un mensaje bonito, y que estemos vivos (y saludables).
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Soy Javier Ruiz, el facilitador del podcast, Superación en Tiempos de Pandemia. Me puedes seguir en la pagina: SuperacionPandemia.com
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Esta entrevista es parte del programa Superación en tiempos de pandemia. Para más información puede accesar la pagina de internet, Youtube, o las diferentes aplicaciones de podcast.
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